Me gustaría poder transformar mi realidad, dejarme llevar a cada momento por mis pensamientos. Apuesta opuesta a detraer, tener cada mañana memoria aterciopelada a voluntad. Bonito sentimiento como si nada hasta que el último proyecto me venga a buscar, así siempre te podría encontrar. En algunas circunstancias, la fantasía un buen día pone distancia, cambia su destino, hace noche en mí, me acerca una luna llena amena, ilusión que vacío en Ti. Escucho un silencio de algodón en mis lágrimas, les pido un tenue siseo, ahí podré componer algún poema para así viajar en los rumores del tiempo que un día me han de llevar. Hacerlo extensible a quien se lo quiera quedar. A veces, se hace la luz en mi boca, en ocasiones, la inspiración me toca con poesía nada fría brotando desde el interior, ampliará un vínculo claro con la voz que me dicta en color desde el más allá. Cómo encontrar el habitáculo donde dormita la razón. Cuál es la frase exacta que muere de pasión. Qué es lo que hay afuera de las siluetas de la imaginación. Quizá una sonrisa naufragando con prisa, tal vez, el tacto de alguna mirada robada navegando en la almohada. La distancia, se fue haciendo más y más corta, sin ningún tipo de pretexto en el contexto de un destino con elegancia tal y como te lo estoy diciendo, sabiendo que a Ti y a mí, nos importa.
Al final, eternamente me quedaré con el calor de tu distinguido savoir faire individual, no necesito nada más. ¿Hay algo más sensual? Tú siempre, te llevarás mi verdad.
