Sacas a la luz del firmamento valiente, la fábrica sin fin de amaneceres resplandecientes, frescos, puros. Habito libre. Tú generas ese estado inmóvil propiciado por la celeste observación de tus dos faros, vehemente añil directo a mis sensaciones, decididas a compartir durante todo el espacio que me quede, tu apasionado camino guiado, dejando a la zaga mi estado varado ya olvidado, sin mirar hacia atrás. Calor emocional, obsequio precioso, milagro de la propia voluntad de entrega que va y viene, inherente a ti.
Eres LA felicidad. Verdad eterna tan anhelada. Juro recorrer a tu lado los límites del universo. Logras reinventarme, abrir mis ojos.
Plantas lenguajes olor azul sincero, no conocido. Regalas imparables aludes, sensación de vivir cada día la mejor de mis vidas, visión periférica absoluta. Completas mis espacios vacíos, que no son escasos. La orquídea más bella, perfección infinita atemporal, no lo olvido.No te olvido.
Son formas de lanzar sentimientos, latido de mis sentidos.
El único sol, calor, hogar, revolución, convencimiento.
Se trata de ti.
Te quiero.
El único sol, calor, hogar, revolución, convencimiento.
Se trata de ti.
Te quiero.
* Hoy, tan cerca de cincuenta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario